La epilepsia infantil es una incidencia que afecta a los niños y niñas, y que se caracteriza porque se genera como consecuencia de una descarga eléctrica en las neuronas de la corteza cerebral. No obstante, en la mayoría de las ocasiones, son benignas y transitorias. Y, en prácticamente todos los casos, remiten con un tratamiento basado en fármacos. La detección precoz es una de las mejores soluciones.
Síntomas de la epilepsia infantil
Sus principales señas de identidad están representadas por la aparición de unas crisis que pueden ser parciales o generalizadas. Por lo que respecta al primer grupo, el síntoma más común es la ausencia o pérdida de conciencia. A lo que se le une una parada de actividad en el niño. Estos procesos pueden ser simples o complejos, en función de su intensidad.
En lo que se refiere a la crisis generalizada, se pueden ver ampliadas con otras manifestaciones. Como, por ejemplo, la contracción muscular general o rigidez corporal que se presenta con sacudidas musculares.
Causas principales de la enfermedad
En algunos de los casos, esta incidencia está originada por antecedentes de esta enfermedad dentro de la familia. En otros casos, el motivo puede deberse al padecimiento del niño de una enfermedad infecciosa grave, generalmente vinculada a la meningitis. También es provocada, en otras ocasiones, por problemas durante el embarazo de la madre. Mientras que en unos casos muy concretos el motivo de su aparición es un traumatismo cerebral o una incidencia de similares características.
Cómo se diagnostica
Una parte muy importante en este trastorno infantil es su diagnóstico. Se lleva a cabo a través de una serie de pruebas muy eficaces y fiables para detectar la epilepsia. Una de las más importantes es por medio de un electroencefalograma. Es el sistema que mejor registra la actividad eléctrica originada por las neuronas de la corteza cerebral. De esta forma, dará la información sobre su inicio y el desarrollo de este proceso.
Otra de las pruebas más relevantes que se utilizan, para conseguir este objetivo, es la representada por la resonancia magnética nuclear cerebral. En este caso, en concreto, se permite obtener una analítica y evaluación psicopedagógica del niño afectado por esta enfermedad. Por otra parte, también puede ser de gran utilidad llevar a cabo una exploración física muy completa, especialmente en la piel y el desarrollo psicomotor.
Tratamientos principales
Según algunos informes clínicos, el 70 % de los casos se tratan con una medicación oportuna. En un porcentaje más bajo es necesario un tratamiento farmacológico. Por otro lado, en los escenarios más complejos, es necesario practicar la cirugía de la epilepsia. En cualquiera de las situaciones, ofrecemos tratamientos para la epilepsia infantil. Contacta con nosotros y te atenderemos muy gustosamente.
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