El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH): Todo lo que necesitas saber

El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, también conocido como TDAH, es una condición neurológica que afecta la capacidad de una persona para prestar atención, controlar sus impulsos y regular su nivel de actividad. Aunque es más comúnmente diagnosticado en la infancia, este puede persistir en la adolescencia y la edad adulta si no se trata adecuadamente.

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Síntomas del TDAH en diferentes edades

Niños:

  • Inatención: Dificultad para seguir instrucciones, prestar atención a detalles, completar tareas, mantener la atención en juegos o actividades, escuchar cuando se les habla, perder objetos, realizar tareas que requieren esfuerzo mental sostenido.
  • Hiperactividad e impulsividad: Inquietud y movimiento excesivo, dificultad para permanecer sentado, correr o trepar en situaciones inapropiadas, hablar en exceso, dificultad para esperar su turno, interrumpir a los demás, actuar sin pensar en las consecuencias.

Adolescentes:

  • Problemas de organización y planificación: Dificultad para organizar tareas y materiales escolares, falta de planificación para exámenes y proyectos, tendencia a la procrastinación, dificultad para administrar el tiempo.
  • Desafíos para cumplir con las responsabilidades escolares: Bajo rendimiento académico, dificultad para seguir instrucciones, falta de entrega de tareas y proyectos, dificultad para mantener la atención en clase.
  • Conductas de riesgo y dificultad para mantener la concentración: Mayor probabilidad de consumo de sustancias, conducción temeraria, actividad sexual sin protección, dificultad para concentrarse en estudiar o leer, mayor propensión a la frustración y la baja autoestima.

Adultos:

  • Dificultad para mantener la concentración en el trabajo: Dificultad para seguir instrucciones, completar tareas, prestar atención a detalles, mantener la organización en el trabajo, procrastinar, cumplir con plazos.
  • Impulsividad en la toma de decisiones: Tomar decisiones apresuradas sin considerar las consecuencias, dificultad para controlar los impulsos, seguir planes a largo plazo.
  • Problemas de gestión del tiempo y la organización: Dificultad para administrar el tiempo de manera efectiva, falta de planificación y organización en la vida diaria, cumplir con citas y compromisos, tendencia a la desorganización en el hogar y el trabajo.

Tipos de TDAH

Existen tres tipos principales de trastorno por déficit de atención e hiperactividad:

1. Inatención: Caracterizado por la dificultad para prestar atención y seguir instrucciones. Una persona que exhibe un conjunto de síntomas de inatención a menudo muestra las siguientes características

  • Se distraen con facilidad.
    • No parecen escuchar cuando se les habla.
    • Pierden objetos con frecuencia.
    • Dificultad para seguir instrucciones.
    • No terminan las tareas escolares o del trabajo.
  • Problemas para organizar y planificar:
    • Dificultad para organizar sus tareas y pertenencias.
    • Dificultad para gestionar el tiempo.
    • Evitan tareas que requieren esfuerzo mental sostenido.
  • Olvidos frecuentes:
    • Olvidan citas, tareas o promesas.
    • Pierden objetos constantemente.
  • Falta de atención a los detalles:
    • Cometen errores por descuido.
    • No prestan atención a los detalles.

2. Impulsividad: Se manifiesta en la dificultad para controlar los impulsos y esperar su turno. Personas que presenta un patrón de síntomas de impulsividad suele tener las siguientes características

  • Actúan sin pensar.
  • Dificultad para esperar su turno.
  • Interrumpen a los demás.
  • Dificultad para seguir reglas.
  • Toman decisiones precipitadas.

3. Hiperactividad: Se refleja en un nivel de actividad excesivo y dificultad para permanecer quieto. Manifiestan un patrón de síntomas de hiperactividad, generalmente presentan las siguientes características

  • Inquietud y movimiento constante.
  • Dificultad para permanecer sentado.
  • Corren o trepan en situaciones inapropiadas.
  • Hablan en exceso.
  • Dificultad para jugar o realizar actividades de ocio en silencio.

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Causas del TDAH

Si bien las causas exactas del trastorno por déficit de atención e hiperactividad aún no se comprenden completamente, se cree que factores genéticos, ambientales y neurobiológicos pueden desempeñar un papel en su desarrollo. La exposición prenatal al tabaco, alcohol o drogas, el bajo peso al nacer y las lesiones cerebrales pueden aumentar el riesgo.

Factores Genéticos: 

  • Estudios de familias y gemelos: Los estudios han demostrado que tiene un fuerte componente hereditario. Si un padre o un hermano tiene la condición, el niño tiene un mayor riesgo de padecerlo.
  • Genes específicos: Se han identificado varios genes que pueden estar asociados. Estos genes parecen estar relacionados con la función de los neurotransmisores, como la dopamina y la noradrenalina, que son importantes para la atención y el control de la impulsividad.

Factores Ambientales:

  • Exposición prenatal: La exposición a ciertas sustancias durante el embarazo, como el tabaco, el alcohol o las drogas, puede aumentar el riesgo en el niño.
  • Prematuridad y bajo peso al nacer: Los niños prematuros o que nacen con bajo peso tienen un mayor riesgo de desarrollarlo.
  • Exposición a toxinas: La exposición a ciertas toxinas, como el plomo, puede afectar el desarrollo del cerebro y aumentar el riesgo.
  • Factores sociales: Algunos estudios sugieren que el estrés familiar, la negligencia o el abuso pueden aumentar el riesgo.

Factores Neurobiológicos:

  • Diferencias en el cerebro: Los estudios de imágenes cerebrales han demostrado que las personas con la condición tienen diferencias en la estructura y función de ciertas áreas del cerebro, como el núcleo accumbens, el lóbulo frontal y el cerebelo.
  • Neurotransmisores: Se cree que las personas con TDAH tienen niveles bajos de ciertos neurotransmisores, como la dopamina y la noradrenalina, que son importantes para la atención, la impulsividad y la motivación.

Impacto del TDAH

En la vida diaria: Puede afectar significativamente el rendimiento académico, laboral y las relaciones interpersonales debido a la dificultad para concentrarse y seguir instrucciones.

En el ámbito familiar: Las familias de personas con TDAH a menudo enfrentan desafíos en la comunicación, la organización y el establecimiento de límites, lo que puede generar tensiones y conflictos.

En la salud mental: se asocia comúnmente con trastornos como la ansiedad y la depresión, lo que puede complicar aún más la calidad de vida de quienes lo padecen.

Diagnóstico y tratamiento del trastorno por déficit de atención e hiperactividad 

Proceso de diagnóstico:

El diagnóstico  implica evaluar los síntomas presentes, recopilar información del historial médico y realizar pruebas de atención y concentración para llegar a un diagnóstico preciso.

Opciones de tratamiento:

El tratamiento puede incluir medicación, terapia cognitivo-conductual, entrenamiento en habilidades sociales y estrategias de manejo del tiempo. Es fundamental abordar de manera integral las necesidades individuales de cada paciente.

Importancia del tratamiento temprano:

Un diagnóstico y tratamiento oportunos pueden mejorar significativamente la calidad de vida de la persona afectada, permitiéndoles desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas y maximizar su potencial.

En conclusión, el TDAH es una condición compleja que puede tener un impacto significativo en la vida diaria, familiar y emocional de quienes lo padecen. En este sentido, es fundamental buscar ayuda especializada y seguir un plan de tratamiento adecuado para mejorar la calidad de vida y el bienestar general. En este sentido, INPA ofrece servicios especializados en el tratamiento del TDAH, brindando apoyo integral a las personas afectadas y a sus familias.

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